Con una población en rápido crecimiento, ¿tendremos suficiente agua para sostener la vida humana?
Se calcula que el mundo contiene cerca de 1.400 millones de km3 de agua. Sólo el 0,003 % de esta enorme cantidad, alrededor de 45.000 km3, son los llamados “recursos de agua dulce”: el agua que teóricamente puede utilizarse para beber, la higiene, la agricultura y la industria. Pero no toda esta agua es accesible. Por ejemplo, las crecidas estacionales hacen muy difícil que se pueda retener el agua antes de que fluya hacia ríos remotos.
De hecho, sólo alrededor de 9.000 a 14.000 km3 están disponibles a nivel económico para el uso humano: una simple cucharadita en una bañera llena si se compara con la cantidad total de agua en la tierra. Con una población en rápido crecimiento, ¿tendremos suficiente agua para sostener la vida humana? Por supuesto, la cantidad no es el único problema. La calidad del suministro de agua también es importante.
¿Sabías que?
La agricultura es, con mucho, el mayor usuario de agua, con casi el 70 por ciento del consumo total, y hasta un 95 por ciento en algunos países en desarrollo.
Como regla general, el agua necesaria para los cultivos asciende a 1.500 m3 por tonelada de cereal cosechado. Dicho de otra manera, se necesitan 1,5 toneladas de agua para producir 1 kg de cereales.
Una persona necesita entre 2 y 4 litros de agua potable al día. Sin embargo, hacen falta cerca de 3.000 litros de agua para producir los alimentos que una persona consume al día.
El agua es importante para la seguridad alimentaria, que se define como el acceso regular de las personas a alimentos suficientes de buena calidad para llevar una vida activa y saludable. Esto es especialmente cierto en los países en desarrollo.
¿Sabías que?
La sequía es la causa individual más común de la escasez grave de alimentos en los países en desarrollo.
Solamente en los países en desarrollo serán necesarios 103.000 millones de dólares EEUU al año para financiar el tratamiento el saneamiento y las aguas residuales hasta el 2015.
En 2011, 768 millones de personas no utilizaban una fuente de agua potable de calidad y unos 2.500 millones de personas no contaban con un saneamiento adecuado.
El derecho a la alimentación no es negociable. Alimentar a la creciente población y reducir el hambre sólo será posible si los rendimientos agrícolas se pueden aumentar de manera significativa y sostenible.
Gran parte del agua del planeta se utiliza para la agricultura, por ello, es evidente que mejorar la gestión de agua usos agrícolas es un factor clave para alcanzar la seguridad alimentaria mundial.
- La FAO calcula que la creciente población del mundo necesitará un 60 por ciento más de alimentos para el año 2050 en comparación con 2006. En los últimos 30 años la producción de alimentos se ha incrementado en más del 100 por cien.
- En los próximos 35 años se espera que el 70 por ciento del aumento de la producción de cereales proceda de las tierras de regadío.
- La FAO estima que la producción de alimentos de regadío aumentará un 8 por ciento en 2050, pero la cantidad de agua utilizada por la agricultura se incrementará solamente un 10 por ciento, gracias a las mejoras en las prácticas de riego.
Fuente: FAO